La idea de “merecer todo” puede tener diferentes significados y connotaciones dependiendo del contexto en el que se use. En este caso, se trata de reflexionar sobre cuánto merecemos en la vida y quién tiene el poder de decidirlo.
Merecer
Hoy leí una frase: “Nunca te conformes con menos de lo que mereces”, y me quedé pensando…
Estoy de acuerdo: no te debes conformar con menos de lo que mereces, pero, ¿cuánto mereces? ¿Quién decide cuánto mereces?
Merecer significa, literalmente, “Estar [una persona] en situación de que se le deba algo“, así que la pregunta interesante podría ser: ¿Por qué mereces algo? ¿Qué méritos tienes? ¿Cómo te has ganado eso que se te debe?
Por supuesto vas a decirme que tú decides cuánto mereces y que mereces TODO..
Y sigo totalmente de acuerdo contigo… solo se me ocurre preguntar: Si puedes merecer TODO, ¿Cuánto es todo para ti? ¿Todo lo que quieras?¿o TODO es TODO?
Y…¿Qué estás haciendo para conseguir lo que dices que mereces?¿Para tenerlo TODO?
¿O se supone que porque tú decidiste que te lo mereces alguien te lo tiene que dar?
Esa prosperidad que dices merecer, esa relación extraordinaria, esa salud, esa justicia que según tú mereces, requieren algún mérito de tu parte y no solamente que según tú te lo hayas ganado porque aparentemente eres alguien especial, o al menos na buena persona.
Eso que mereces requieres crearlo tú mismo, sembrarlo, cultivarlo, trabajar por ello, y al final, la vida, que es imparcial y a cada quien te devuelve el resultado de lo que creado para sí y los demás.
Mereces poco si das poco, mereces mucho si das mucho, mereces TODO si das TODO. Y aunque lo puedes merecer TODO, nadie te lo debe, requieres ser tú quien al dar todo, se esté dando a si mismo ese todo que cree merecer.
Nadie te debe nada. Solamente tú.
Si te lo mereces, dátelo.
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