Decisiones, contextos y comida china

¿Te ha pasado que no importa cuánto te esfuerces, siempre terminas obteniendo resultados similares? Las mismas relaciones, las mismas finanzas, los mismos patrones que parecen repetirse una y otra vez, incluso cuando intentas cambiar. ¿Por qué parece tan difícil salir de ese círculo?

Cuando repasas todas las decisiones que te llevaron a este lugar, quizás te sorprendas al descubrir algo inquietante: bajo las mismas circunstancias, probablemente volverías a tomar las mismas decisiones. Incluso si todas tus elecciones parecían ser “correctas”, los resultados no reflejan lo que realmente quieres. Entonces, ¿qué está pasando aquí?

Te lo voy a decir directamente: porque no eres tú quien ha elegido. Sí, suena fuerte, pero quédate conmigo.

¿Entonces quién decide realmente?

La verdad es que, aunque creas que estás tomando tus propias decisiones, muchas veces no lo haces. ¿Sabes quién o qué lo hace? Las conversaciones disponibles en tu contexto. Es decir, el marco mental y emocional en el que te encuentras define las opciones y posibilidades que percibes como viables.

Por ejemplo, tal vez has escuchado la frase: “¿Qué conversación te está usando?”. Esto se refiere al hecho de que no siempre somos conscientes de cómo nuestra percepción de la realidad está condicionada por el entorno en el que estamos inmersos. Y estas “conversaciones” que parecen tan normales y evidentes no solo limitan nuestras elecciones, sino que también determinan nuestros resultados.

El contexto: el filtro que define tus elecciones

Imagina que tu contexto es como una enorme barra de buffet, digamos de comida china. Ese buffet tiene absolutamente todo lo que podrías desear… dentro de la comida china. Puedes escoger lo que quieras, desde dim sum hasta pato laqueado. Pero, ¿y si quisieras algo completamente diferente, como una pizza o un taco? Simplemente no están ahí. No los puedes ver. No existen en ese buffet. A efectos prácticos, esas opciones son invisibles dentro de ese contexto.

Este ejemplo puede parecer simple, pero refleja perfectamente cómo funciona nuestra mente en relación con las posibilidades. El contexto en el que vivimos —nuestras creencias, experiencias, cultura, e incluso las expectativas sociales— define qué consideramos razonable y posible. Y lo que está fuera de ese marco, aunque pueda existir, simplemente no lo vemos.

Lee también  De Comités, Bulling y el Síndrome de Estocolmo

¿Por qué las decisiones razonables no siempre funcionan?

Ahora mismo, probablemente tomas decisiones razonables basadas en las opciones que tu contexto actual te ofrece. Pero aquí está el punto crítico: si las decisiones que consideras “lógicas” no te están llevando a donde quieres, tal vez es porque estás limitando tus posibilidades dentro de un marco que ya no te sirve.

Lo irrazonable, por otro lado, es aquello que parece imposible desde tu contexto actual, pero que puede ser perfectamente lógico en otro marco de referencia. Para salir de esta trampa, necesitas explorar otros contextos o incluso crear uno completamente nuevo que se alinee con lo que realmente deseas.

Expandir el buffet: crear nuevas conversaciones

Para abrirte a nuevas opciones y posibilidades, necesitas cuestionar las “conversaciones” que te están usando. Esto implica identificar las creencias y suposiciones que están moldeando tus decisiones. Pregúntate:

  1. ¿Qué posibilidades estoy ignorando porque no encajan con mi contexto actual?
  2. ¿Qué decisiones he tomado basándome en lo que considero razonable, pero que no han funcionado?
  3. ¿Qué conversación nueva podría abrirme las puertas a los resultados que deseo?

Siguiendo con la metáfora del buffet, tal vez sea momento de salir de la comida china y explorar otros estilos culinarios. Si lo que quieres es un buen plato de spaghetti carbonara, entonces necesitas buscar el buffet de comida italiana o incluso inventar uno propio.

Crear un nuevo contexto: el verdadero poder de elección

El verdadero cambio ocurre cuando tomas consciencia de tu contexto y decides construir uno diferente. Este proceso no es fácil, pero es liberador. Comienza identificando tus metas y sueños más grandes, aquellos que parecen imposibles desde donde estás parado ahora. Luego, hazte estas preguntas:

  1. ¿Qué tipo de persona tendría esos resultados?
  2. ¿Qué contexto le permitiría lograrlo?
  3. ¿Qué creencias o conversaciones necesito dejar atrás para crear ese nuevo contexto?

Crear un nuevo contexto es como pasar de un buffet limitado a un restaurante con un menú completamente personalizado. No estás limitado por lo que ya existe; puedes diseñar algo que refleje exactamente lo que quieres.

Lee también  ¿Lo que sabes es la VERDAD?

El impacto de cambiar de conversación

Cuando tomas control sobre las conversaciones que moldean tu realidad, comienzas a abrirte a opciones y posibilidades que antes eran invisibles. Lo que antes parecía irrazonable se convierte en tu nueva normalidad. Es un cambio poderoso que transforma no solo tus decisiones, sino también tus resultados.

Recuerda: no se trata de que tu contexto actual esté mal. No hay nada de malo en disfrutar del buffet de comida china si eso es lo que quieres. Pero si anhelas algo diferente, necesitas expandir tu perspectiva y considerar otras opciones. Esa es la clave para salir del ciclo de resultados repetitivos y comenzar a construir la vida que realmente deseas.

Elige conscientemente

El cambio comienza al darte cuenta de que tu contexto actual no es la verdad absoluta, sino solo una perspectiva. Desde esa comprensión, puedes elegir conscientemente crear una nueva conversación que te lleve a los resultados que siempre has soñado.

¿Estás listo para salir del buffet de comida china y explorar un mundo lleno de opciones y posibilidades? El primer paso es cuestionar tu contexto y atreverte a soñar más allá de lo que ahora parece razonable. ¡Todo es posible si estás dispuesto a crear un nuevo marco para tu vida!

Bernardo Villar
Sígueme
Últimas entradas de Bernardo Villar (ver todo)