Ser, Hacer, Tener. Tres condiciones de la existencia y tres distinciones tan importantes que pueden ser la diferencia entre tener los resultados que quieres y no tenerlos. Veamos a qué me refiero con esto…
Ser, Hacer, Tener
Vamos a aclarar con un ejemplo tonto el asunto de SER – HACER – TENER…
Piensa en un dolor de cabeza.
Se quita con dos aspirinas o paracetamol, o ibuprofeno, como prefieras, aquí voy a decir que aspirinas.
Lo que te quita el dolor no es que sean dos pastillas, ni cuanta agua te tomes con ellas.
No te quita el dolor de cabeza saber que dos pastillas te lo quitan. Tampoco te lo quita querer tomártelas.
Lo que te lo quita no es la accion de tomar dos pastillas con abundante agua. Te quita el dolor de cabeza que el contenido de la pastilla ES aspirina. La acción de tomar dos pastillas no es lo importante. Lo importante es que SEA aspirina. El resultado (el tener) de la aspirina es quitar el dolor de cabeza.
Así pasa muchas veces: sabemos el resultado que queremos, sabemos la acción correcta, sin embargo no somos el SER correcto para tener ese resultado. (No somos la aspirina)
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